Cosas a tener en cuenta antes de comprar una casa

Ahora que has decidido que deseas comprar una casa, debes de saber que te esperan unos meses complicados, y más vale que esto sea así, pues si te dejas llevar por un impulso puedes acabar arrepintiéndote.

Debes tener en cuenta que al contrario que sucede con un alquiler, comprar una casa es sinónimo de vivir allí durante bastantes años, y en tal caso, más vale que la decisión sea acertada.

Entre las cosas a tener en cuenta debe de ser la zona, algo muy pero que muy importante. Lógicamente no todo el mundo el mundo tiene el mismo concepto de lo que es una buena zona, y de la que no lo es, eso dependerá también de lo que estás buscando. En algunos casos, puede que estés buscando tranquilidad, un lugar apartado en donde los vecinos no te molesten, o buscar un sitio rodeado de naturaleza, con árboles y plantas por todas partes y vivir al estilo más campestre posible.

En otros en cambio, debes interactuar con la ciudad, ya sea porque trabajas en ella, o porque te veas obligado a desplazarte hacia ella de forma continua, en tal caso, debes de plantearte que elegir vivir muy lejos de la zona urbana, te obligará a desplazarte todos los días, y a veces te llevará bastante tiempo en medios de transporte tanto para ir como para volver.

Depende de tu situación familiar, puede interesarte que existan colegios cercanos a tu residencia, siempre es mucho más cómodo que tus hijos puedan ir caminando al colegio, que qué ellos se vean obligados todos los días a ir en los diversos transportes públicos, o que te veas tu mismo obligado a llevarles a la escuela cada día.

Tener a mano a los distintos supermercados o centros comerciales, es otro aspecto a tener en cuenta. Sino, deberás de pensar que cada vez que te haga falta algo, aunque sea algo tan sencillo como el pan, o un litro de leche, tendrás de coger el coche, o lo que es peor, pagar un sobreprecio por verte obligado a comprarlo en una tiendilla de barrio.

Por supuesto, la tranquilidad es fundamental, vivir en una zona en la que los vecinos no paran de hacer ruidos, tanto de día como de noche, o en los que hayan ambientes turbios y en los que uno no pueda sentirse seguro, desde luego, no son los mejores atractivos.

Para comprobar todas estas cosas, lo más fácil es ir a ver la zona, y si te gusta lo que ves, vuelve otro día a una hora distinta, te harás una idea general de hasta que punto te encontrarías a gusto en ese lugar.